14 Exposición:

RIO

Claudio Edinger

DE 02 El de Julho 31 DE AGOSTO DE 2008

Fluidez y Permanencia: El Rio es a Brasil lo que París es el francés y New York en los Estados Unidos: el imán irresistible y el último desafío para todos los fotógrafos. Se necesita una cierta cantidad de coragem descompromisso o total de la historia por haberse atrevido a ponerse de pie delante de u CÁMARA DE PAISAJE pero conhecida y sostuvo el um país, Tao celebró y grabó em nuestro inconsciente, NEM es já PAISAJE, escenario es um.

Con el Rio, Claudio Edinger nos ofrece um Conjunto de fotografías de la ciudad dotado de cohesión rara. Él es muy hábil en desvelar el alma de las personas y ciudades, penetrar bajo el caparazón visible para desentrañar sus corazones.

Comoquiera que, donde, Chelsea en la habitación del hotel, un Juqueri asilo dormitorio, en Nueva York, La Habana, o Calcuta, Edinger saber siempre dibujar lo mejor de las personas y cosas, cometer su innegable talento y energía prodigiosa de un viaje incesante a través de la zona de penumbra de las personas y ciudades. Todo más allá de lo banal atrae, tanto en personas, y en las ciudades.

La culminación de una carrera sólida y bien realizado, Río técnica demuestra la versatilidad Edinger, un autor que se mueve con facilidad en varios formatos, saltando de color de blanco a negro y con el mismo despacho.

Apoyado en su sólido conocimiento técnico, ya atestiguada en una docena de libros, Claudio Edinger arrebató la cámara 4 x 5 su entorno habitual de cuidado y veneración al arrastrarlo a través del universo profano, hedonista, irritable y acelerada de la ciudad de Río de Janeiro.

Edinger es un carioca que muchos creen que es una Paulista New Yorker. La verdad es que Edinger nació en la bendita ciudad de Sao Sebastiao do Rio de Janeiro, pero la familia interdictos se exilió en la infancia a Paulicéia, donde volvió con entusiasmo todas las vacaciones para disfrutar del verano encantado de la vida en Río. Adulto, vive desde hace dos décadas en Nueva York, epicentro de la toma fotográfica, antes de regresar a St. Paul. Sin embargo, Rio mantuvo en su corazón, quema de pecho Itabira Drummond, que plaga benigna para el que no se busca consuelo en su afán de hacer crónica e incurable. Después de haber llegado a su punto de excelencia, Claudio Edinger se atrevió a pisar de nuevo el largo y sinuoso carril de la memoria para celebrar este fotográficamente su desenfrenada historia de amor con Rio, la producción de un artículo que aparecerá en un lugar destacado en el panteón de los grandes fotógrafos de relaciones icónicas con las principales ciudades.

Peter Karp Vasquez.